El servicio de transporte público de colectivos no tiene respiro. Viene de un paro de choferes en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y está en medio de una medida de fuerza que afecta al interior del país. En este contexto, las empresas concesionarias salieron con los tapones de punta contra Luis Caputo.
La Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA) publicó la carta documento que le hicieron llegar al ministro de Economía de la Nación las 5 cámaras empresarias del transporte automotor de pasajeros del AMBA (AAETA, CEAP, CETUBA, CTPBA y CEUTUPBA). En la misiva reclaman, con duros términos, que les paguen los subsidios adeudados y denuncian una artimaña del gobierno libertario para subestimar los fondos que le corresponden a las compañías.
Según denuncian, el Estado nacional les debe 50.278 millones de pesos en concepto de compensaciones tarifarias de enero y febrero. Las empresas sostienen que de lo contrario no podrán pagar la suma no remunerativa de 250 mil pesos que acordaron en la última paritaria con la UTA y que deberían depositar mañana. “El 70% de nuestros ingresos son subsidios estatales y el 50% de nuestro costo es mano de obra”, explicaron. Este escenario hace suponer que la Unión Tranviarios Automotor podría convocar a un nuevo paro de choferes.
Pero la deuda sideral que mantiene la administración empresaria con las empresas de transporte no es el único problema. Efectivamente, las concesionarias denunciaron en la misma carta documento que la Secretaría de Transporte de la Nación calculó mal los costos operativos para bajar los subsidios correspondientes. En la misiva se habla de “groseros errores de cálculo” y de una subestimación de los costos del 30 por ciento.
“El Estado sigue fijando de manera equivocada y arbitraria cuál debe ser el nivel de ingreso, para luego y sin explicación alguna retener la caja de las empresas, pero sin asumir la responsabilidad que provoca este default sobre las servicios“, lamentaron los operadores.