SEGÚN EL INDEC

La canasta básica total aumentó un 94,6% en el año y las familias luchan por no caer en la pobreza

En septiembre, la canasta básica total se incrementó un 2,6%, alcanzando $964.620, mientras que la interanual registra un alarmante 202%.

La canasta básica total (CBT) registró un incremento del 2,6% en septiembre en comparación con el mes anterior, lo que implica que una familia tipo necesitó $964.620 para evitar caer en la pobreza, según los datos brindados por el INDEC.

En lo que va del año, la canasta básica experimentó un aumento del 78,1%, mientras que la canasta básica total subió un 94,6%. Estos incrementos han resultado en variaciones interanuales del 189,9% para la canasta básica alimentaria y del 202% para la canasta básica total.

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En ese contexto, una familia de tres personas (una mujer de 35 años, su hijo de 18 y su madre de 61) necesitó ingresos de $767,950 para no ser considerada pobre y de $341,311 para no caer en la indigencia.

Por otro lado, una familia tipo de cuatro integrantes (un hombre de 35 años, una mujer de 31, un hijo de 6 y una hija de 8) debió contar con $964.620 para no caer en la pobreza y $428.720 para no atravesar el umbral de la indigencia.

Finalmente, un hogar de cinco integrantes (un hombre y una mujer, ambos de 30 años, y tres hijos de 5, 3 y 1 año) necesitó un ingreso total de $1.014.568 para no caer en la pobreza, y de $450.919 para evitar ser calificado entre los indigentes en Argentina.

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La inflación de septiembre fue del 3,5%, según el INDEC

El INDEC publicó el índice de precios al consumidor (IPC) correspondiente a septiembre, que muestra una inflación del 3,5%, la cifra más baja del año. En términos interanuales, la inflación alcanzó el 209%, mientras que el acumulado en los primeros nueve meses de 2024 es del 101,6%.

Entre los sectores que más impactaron en este aumento, las tarifas de servicios públicos, que incluyen agua, electricidad, gas y vivienda, se incrementaron un 7,3% en promedio. Otros rubros que también superaron la inflación general son la ropa y calzado, con un aumento del 6%, y la educación, que subió un 4,3%. Los restaurantes y hoteles también vieron un alza del 3,7%.

Por otro lado, el sector de alimentos y bebidas no alcohólicas, que representa una parte significativa del gasto familiar, tuvo un aumento del 2,3%, siendo uno de los rubros que menos incrementó en comparación con otros. La recreación y cultura también reportaron un incremento moderado del 2,1%.

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