De la mano de María Eugenia Vidal y Cristian Ritondo, dos de los nombres que Mauricio Macri busca colar en el gobierno de Javier Milei ante la crisis política desatada con la caída de la ley Ómnibus, el PRO salió a darle volumen al operativo extorsión para asfixiar financieramente a Axel Kicillof y los gobernadores.
Tras conocerse que el gobierno de la provincia usó recursos propios para abonar los sueldos de enero a los maestros y alertó que no podrá la totalidad de los salarios si nación no envía los fondos del Incentivo Docente (FONID), Conectividad y Material Didáctico, los diputados del PRO culparon a la administración bonaerense por no hacer el “ajuste” con el que el oficialismo pretende disciplinar a sus adversarios.
Esa plata, hay que destacar, debería haber sido transferida desde el gobierno nacional, de acuerdo a las leyes 26.075 y 25.053, lo cual no ocurrió.
Las contradicciones del PRO para justificar el ajuste a los bonaerenses
Con la curiosidad semántica donde explicita que ya no siente orgullosamente bonaerense y habla de “la provincia que gobierna Kicillok”, María Eugenia Vidal le echó las culpas al Gobierno provincial por no hacer el “ajuste” político.
“El ajuste de la provincia no lo paga la política, lo pagan los maestros” sintetizó para responsabilizar al “modelo que defienden el kirchnerismo y Baradel”.
Su planteo entra en contradicción con los numerosos reclamos por discriminación en materia de coparticipación federal que sufre la provincia de Buenos Aire – produce el 40% del PBI y recibe el 20%- y que, en su gestión, la llevaron a dar la pelea por la actualización del Fondo del Conurbano.
El posteo de la exgobernadora también provocó indignación en los usuarios de la red social X, quienes le recordaron que durante su paso por la gestión “cerraron escuelas”, hubo “recortes educativos”, hubo “persecución” a los docentes y se produjo la trágica muerte de Sandra y Rubén por la explosión en una escuela de Moreno.
En la misma línea, se paró Cristian Ritondo. El exministro de Seguridad bonaerense omitió la reducción de fondos de nación y cargó las culpas a los gastos con los viajes de egresados gratuitos del gobierno de Axel Kicillof, una política pública que apunta a igual oportunidades y a extender la temporada turística para reactivar la economía del sector.


