El aislamiento estricto en barrios populares funcionó y sólo se contagió el 15% de los vecinos

El Ministerio de Salud de la Provincia realizó un operativo para medir anticuerpos de covid-19 en los barrios populares que habían sido más afectados por el coronavirus y encontró datos positivos: Por el aislamiento estricto en dichos barrios, no se superó el 15% de infectados.

El brote en Villa Azul, el barrio popular que comparten Quilmes y Avellaneda, a principio de abril generó un enorme alerta en la Provincia y el Municipio, cuando todavía los casos de covid-19 no tenían las cifras diarias elevadas que hay por estas semanas.

Por las condiciones precarias de hábitat, y la imposibilidad de realizar una cuarentena domiciliaria, el gobierno de la Provincia decidió cerrar el barrio con ayuda de la Gendarmería Nacional y aislar colectivamente a todos los vecinos. Sólo podrían entrar provisiones y ambulancias, en caso de que hiciera falta. El aislamiento estricto duró dos semanas, y se confirmaron 344 casos.

Cuatro meses después, las autoridades provinciales regresaron al barrio a realizar tests serológicos en un "operativo de seroprevalencia", para conocer cuál fue la cifra real de infectados y el alcance del virus, más allá de los casos sintomáticos que fueron hisopados y confirmados.