Finalmente se confirmó el ingreso del dos veces gobernador bonaerense, Daniel Scioli, al gobierno de Javier Milei. El ministro del Interior, Guillermo Francos, anunció que el hasta hoy embajador argentino en Brasil se hará cargo de la Secretaría de Turismo, Ambiente y Deportes de la Nación.
El desembarco de Scioli en el gobierno de Milei venía siendo motivos de especulación desde que se supo que Francos sería Ministro del Interior.
El ex motonauta fue uno de los primeros dirigentes peronistas en saludar al Presidente cuando se confirmó su victoria en el balotaje, ocasión que aprovechó para recordar su “gran amistad” con quien fuera presidente del Banco Provincia.
Scioli se hará cargo de una agenda que conoce y explota bien. Ya fue secretario de Turismo y Deportes entre 2001 y 2003, durante la administración de Eduardo Duhalde. También supo darle cierta impronta “verde” a su gestión como gobernador, de la mano del ex Soda Stereo, Charly Alberti.
La Provincia pagará un bono a auxiliares para asegurar las clases tras las elecciones
Un bono remunerativo recompensará a los auxiliares que participen del operativo de limpieza de las elecciones, asegurando clases normales el lunes.
Bronca del massismo por la designación de Daniel Scioli
El nuevo trabajo de Daniel Scioli cayó una bomba en el entorno de Sergio Massa. El exsenador y actual miembro del directorio del BAPRO, Sebastián Galmarini, reaccionó inmediatamente en la red social Twitter.
“Estas son grandes noticias para nuestra comunidad! Con fe y esperanza, los oportunistas, ventaneros, especuladores y extorsionadores son los Opositores! Pero para eso los eligieron! Ahhh. No. No se que decir”, ironizó el dirigente del Frente Renovador.
No fue el único que tiró la bronca. Desde el interior, el intendente de Castelli, Francisco Echarren, dijo lo suyo. “Siempre necesitaron de “dialoguistas” para entregar la patria”, escribió con un poco de misterio.
El abrazo con Sergio Massa, cosa del pasado
Vale la pena recordar que sciolismo versus massismo fue durante varios años la tensión que afloró en la política bonaerense. Años de desconfianzas mutuas parecieron llegar a su fin en 2023.
El año pasado hubo abrazo entre el propio Sergio Massa y el ahora funcionario mileista, que significó un apoyo explícito durante la campaña electoral. Incluso se especuló con que Scioli podía llegar a ocupar la cancillería si Massa arribaba a la Presidencia.
La decisión política de Scioli volvió a abrir las heridas.
