El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, anunció esta mañana que enviará a la Legislatura un régimen de fomento para inversiones estratégicas, una suerte de “RIGI” con el que buscará adecuar la normativa provincial a las necesidades de inversores de gran magnitud.
El anuncio se produce en el marco de la renovada polémica con el Gobierno nacional y parte de la oposición, que reclaman la adhesión de la Provincia al RIGI que sancionó el Congreso y aún no reglamenó el Ejecutivo.
“Pretendemos englobar los requisitos y necesidades que presentan las compañías para llevar el proyecto de Bahía Blanca”, planteó Kicillof en conferencia de prensa.
Axel Kicillof anunció que enviarán a la Legislatura un proyecto para fomentar inversiones estratégicas.
La idea, dijo, es “acelerar los tiempos” de la burocracia estatal. Por ejemplo para cuestiones ambientales que las empresas piden que se hagan rápidamente”. “Los proyectos que se incluyan tendrán prioridad”, aclaró.
La postura de Axel Kicillof sobre el RIGI y el proyecto GNL
Previamente Kicillof había explicado la historia del proyecto GNL, que asocia a YPF con Petronas en una inversión de 50 mil millones de dólares, y que está supeditado hoy, de acuerdo a los planteos del presidente de la petrolera estatal, a la adhesión de Provincia al RIGI.
Al respecto, Kicillof aclaró que el Régimen de Incentivo de Grandes Inversiones (RIGI) no está reglamentado, aunque dejó críticas para su aplicación, al considerar que contiene condiciones excesivamente favorables para las empresas.
También aclaró que mediante la Ley GNL, los pedidos de Petronas para desembolsar su parte en el proyecto GNL ya estaban contemplados.
¿Cómo va a ser el RIGI bonaerense?
Tras el anuncio hecho por Kicillof, el ministro de Producción, Augusto Costa, dialogó con la prensa sobre los detalles del régimen de fomento para inversiones estratégicas. Sin embargo, aún falta la letra chica del proyecto y también los eventuales cambios que pueda sufrir durante el trámite legislativo.
“El régimen provincial va a requerir que se demuestre claramente cuál es el impacto productivo, económico, social y ambiental en la provincia de Buenos Aires para acceder a beneficios“, aclaró el funcionario. Esto implica que, en principio, no va a haber un monto de inversión para adherir ni tampoco se va a limitar a alguna industria o sector productivo en particular.
A diferencia del RIGI aprobado por el Congreso de la Nación, la idea del gobierno bonaerense es designar a una autoridad que evalúe cada presentación para ver si califica y es posibe que se sume al régimen. “En la medida en que cumpla condiciones de generación de valor agregado, de empleo de calidad, de transferencia tecnológica, de desarrollo de proveedores y de impacto en el entramado productivo vamos a tratar de ser amplios”, puntualizó el ministro de Producción.
Como contrapartida, los beneficios que ofrecerá el Estado provincial tienen tres ejes: impositivos, previsibilidad y acompañamiento. En concreto, incluirá beneficios vinculado al impuesto a los Ingresos Brutos y Sellos. También estabilidad fiscal por una determinada cantidad de años que aún falta definir.
Finalmente, la Provincia pondrá en marcha “herramientas de acompañamiento” vinculadas a asistencia técnica y a acelerar gestiones para “favorecer la agilidad de la radicación de las inversiones”.