Tras un primer trimestre lapidario, el segundo no empezó bien para las pequeñas y medianas empresas ( pymes). Al menos eso refleja la encuesta Radar Pyme elaborada por la Asociación de Empresarios y Empresarias Nacionales para el Desarrollo Argentino (ENAC). El impacto de la recesión en la provincia de Buenos Aires.
El relevamiento se realizó durante julio y encuestó a 352 empresas, cooperativas y autónomos, más del 33 por ciento de ellas, emplazadas en territorio bonaerense. Los resultados muestran cómo les fue en abril, mayo y junio a las compañías en relación a sus ventas, costos y su nivel de actividad. También dan un panorama de cómo se proyectan para lo que queda del año.
De todos los encuestados, solo el 21 por ciento dijo tener buenas ventas y más del 51 por ciento registró malas ventas. Estos números coinciden con otros informes sectoriales que vienen dando cuenta de la fuerte caída del consumo en casi todos los rubros.
Como era de esperar, la falta de ventas impactó en la productividad de las empresas. Según la encuesta de la ENAC, solo el 43 por ciento de las pymes encuestadas operó “en situación de normalidad”, es decir, usando al menos el 60 por ciento de su capacidad instalada (UCI). Si se mira solo a las industrias ese porcentaje es aún más bajo: el 36 por ciento.
La asociación empresaria expresó su preocupación por esta cifra ya que se estima que niveles de UCI menores al 50 por ciento genera reducción de horas extra, cierre de líneas de producción, suspensiones y hasta despidos. Asimismo, niveles de uso de la capacidad instalada menores al 20 por ciento terminan, generalmente, en el cierre de fábricas.
“Si la recesión económica que ya se extiende al segundo semestre, se mantiene en estos niveles de actividad deprimidos, el escenario más probable es que se pierdan otras 10.000 pymes más hasta fin de año“, pronosticó la ENAC. Se trata de “un costo demasiado alto en virtud del beneficio de reducir la inflación”, completó.
Las pymes en emergencia
Tras los preocupantes resultados del relevamiento, la ENAC cargó las tintas contra el ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo por la “recesión auto inducida”. De hecho, los encuestados apuntan sus cañones en el mismo sentido: el 67,4 por ciento aplazó la gestión de Caputo quien obtuvo una calificación promedio de 3 puntos sobre 10.
En cuanto a las perspectivas futuras la evaluación del relevamiento no difiere mucho de la situación presente. El 65 por ciento de los empresarios cree que la situación económica nacional será peor y el 43 por ciento la pronosticó como “mucho peor”. Del otro lado, apenas un 17 por ciento respondió que cree que mejorará.
Frente a la amenaza de que cierren 10 mil pymes y de los miles de despidos que eso podría generar, la ENAC reclamó “una ley de emergencia pyme para mitigar el daño”.