Pañuelos Amarillos

Caso Rivarola: piden una justicia ejemplificadora

La referente de la Fundación Pañuelos Amarillos Colomba Nasca repudió el rol del fiscal Fernando Rivarola que consideró un acto de “desahogo sexual” al delito donde una manada de jóvenes violaron a una chica de 16 años en Chubut. Dijo que la “justicia tiene que ser ejemplificadora para que la sociedad comprenda la gravedad de los delitos de abuso”.

El hecho ocurrió en el 2012. La joven había participado de una fiesta donde fue drogada y violada. Solo tres de los jóvenes involucrados reconocieron los hechos para bajar la pena y se llegó a un juicio abreviado. Rivarola tomó de oficio el caso. Los imputados son Leandro Del Villar, Marcelo Quintana, Luciana Mallemaci, todos mayores de edad cuando ocurrió la violación. Los otros dos, R.V. y T.S., quienes al momento del abuso eran menores de edad, fueron sobreseídos. Todos están libres.

Pañuelos Amarillos es una organización social donde madres, cuyos hijos fueron víctimas de todo tipo de abuso, luchan para que la justicia imparta condenas ejemplificadoras. No fue el caso de Rivarola que “en lugar de defender a la víctima se puso del lado de los imputados” dijo Nasca, al mando de los Pañuelos dispersos en todo el país.

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“Esto evidencia la concepción normalizar, minimizar la caratula de abuso sexual con acceso carnal a una abuso sexual simple. Es una actitud que termina con frase tan hiriente para la víctima y falta total de perspectiva de género” dijo.

“El fiscal es el que tiene que defender a la víctima, pero en este procedimiento se beneficia al imputado con una pena inferior. La víctima no puede decir yo no acepto el ofrecimiento de que hayan reconocido el hecho. El fiscal sí se puede oponer y pedir un debate oral y pedir una condena ejemplificadora. En este caso sorprende toda la situación porque la persona que es que el Estado y que se encarna en la persona del fiscal se pone del lado de los imputados tratando de normalizar o minimizar lo que es un abuso sexual” dijo la abogada.

El fiscal Rivarola. Liberó a todos los violadores. 

Según Nasca estas decisiones son las más generan “confusión en la sociedad porque la gente no termina de entender de que se trata el abuso sexual a un menor” y agregó “se naturaliza que si esta chica estaba en una fiesta había un consentimiento para todo pero no es así porque la chica perdió la conciencia. Es decir estaba en una situación de indefensión y vulnerabilidad. Cuando el fiscal dice desahogo sexual está interpretando que hubo algún tipo de consentimiento. Como que estábamos en una fiesta y nos hemos desahogado de esa forma” completó.

“Hablar de un desahogo de muchos con una sola persona es llamativo y el fiscal que la tenía que defender prácticamente ayuda a los imputados.” dijo.

“Desde Pañuelos Amarillos venimos reclamando un cambio social porque la sociedad no lo ve al abuso sexual como un abuso muy grave. Tenemos un sistema judicial que no ayuda. El abuso sexual es un delito y tiene que tener una condena ejemplificadora para la sociedad. Porque si no cada uno puede hacer lo que quiere con el cuerpo del otro. La justicia tiene que defender y no mirar para otro lado. Esto sienta un precedente. Esta sentencia de desahogo sexual va a ser invocada en otra situación similar.

"Entonces lejos de poder defender a la víctima y pedir penas severas para poder reparar judicialmente nos encontramos con un Estado que desaparece” concluyó.

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