Sociedad
Consecuencias del aislamiento

Otra cara de la pandemia: ¿cómo viven los manteros senegaleses de La Plata?

Los trabajadores ambulantes de la ciudad de La Plata se encuentran en una situación compleja por el Coronavirus. Desde que comenzó el aislamiento social no pudieron salir a vender sus productos y esto afecta su vida, y la de sus familias en Senegal.

Hasta que comenzó el aislamiento social, el centro de la ciudad de La Plata se llenaba de vendedores ambulantes que ofrecían productos que iban desde cargadores portátiles para celulares hasta camisetas de la NBA. Se los encontraba fácilmente por avenida 7 o por las calles 8 y 12. Ellos son inmigrantes senegaleses que vinieron a Argentina a probar suerte para mantener a sus familias que siguen en África.

A partir de la pandemia del Coronavirus y la medida de aislamiento social que se tomó desde el gobierno para evitar que se propague rápidamente, la vida de estos trabajadores cambió. Al igual que millones de argentinos, no pueden salir de sus casas a vender su mercadería, por lo que su situación económica está en riesgo.

TE PUEDE INTERESAR

“Sobrevivimos vendiendo en la calle y si no podemos salir, nos afecta”, dice Cheikh, un trabajador senegalés de La Plata. Mustafa, otro inmigrante de la ciudad, afirma que respeta las medidas del gobierno, “por eso no salgo de casa. Sólo a buscar las cosas que necesito”.

A partir de estas dificultades, esperan recibir ayuda para sobrevivir mientras dure el aislamiento. Algunos podrán acceder al bono de 10 mil pesos, para el que deben anotarse en la página web del ANSES. Ellos son los que pudieron tramitar su documento de identidad en Argentina.

Cheikh nos cuenta que “todos los chicos que pudieron sacar el documento acá, son monotributistas, y pueden cobrar. Lo que pasa es que varios no tienen el DNI y les puede afectar más esto”. Mustafa agrega preocupado: “Necesitamos ayuda económica porque sin trabajar se complica para vivir. Más para nosotros que tenemos familia en Senegal que depende de nuestro trabajo”.

En ese sentido, se encuentran bien informados ya que algunos entienden bastante castellano y traducen todas las novedades, que comparten en un grupo de Whatsapp. “Estamos viendo si podemos acceder a comedores públicos para recibir comida. Hasta el 31 vamos a poder aguantarlo, pero si se extiende va a ser muy complicado”, cuenta Cheikh ante la imposibilidad de mantenerse.

Su máxima preocupación es la situación de sus familias en Senegal, que dependen del dinero que les mandan desde acá. “Muchas vidas en Senegal dependen de lo que consigamos nosotros. Si nosotros no tenemos para comer, tampoco vamos a poder enviar nada”, dice Cheikh.

Más allá de esta situación, describen que luego de las elecciones presidenciales, se encuentran “más tranquilos en La Plata. A pesar de la crisis económica, siempre conseguíamos para sobrevivir y ayudar a nuestras familias”. Aunque también aclara que “lo que pasa acá no es lo mismo que pasa en Buenos Aires o en otros lugares”.

TE PUEDE INTERESAR