Con apoyo de la oposición

El Senado aprobó la Ley de Góndolas que busca promover la competencia entre grandes marcas y pymes

El proyecto oficial qque persigue el objetivo de limitar la concentración de la oferta de las compañías líderes en el sector del consumo masivo, para favorecer a las Pymes, fue impulsado por el Gobierno y recibió 56 votos afirmativos y cuatro abstenciones.

El Senado sancionó hoy la Ley de Góndolas, una iniciativa que busca ordenar la distribución de los productos en los supermercados y favorecer a las Pymes y a las economías regionales, en el marco de la política oficial para bajar los alimentos.

La iniciativa fue originalmente presentada por legisladores de Juntos por el Cambio a comienzos del año pasado, cuando eran oficialismo. Más tarde se unificó a los proyectos del Frente Renovador; y en esta última etapa fue impulsada por el Frente de Todos. Naturalmente, entidades que representan a las pymes defienden la iniciativa, mientras que entre los supermercados hay fuerte rechazo.

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Así, el proyecto contó con 56 votos a favor, ninguno negativo y cuatro abstenciones, en una sesión en la que el interbloque de Cambiemos, pese a acompañar, calificó como "inocua" por "no resolver el problema de la inflación”.

El jefe de los senadores del Frente de Todos, José Mayans, dijo que le "alegraba" el acompañamiento de la oposición a la iniciativa; afirmó que servirá para avanzar en la búsqueda de "una Argentina más justa" y consideró que se trata de "una ley más con la intención de tener precios justos".

Las abstenciones fueron de Martín Lousteau, Lucila Crexel, Esteban Bullrich y el santacruceño Eduardo Costa.
 

 

De qué se trata la Ley

 

El proyecto establece que las cadenas comerciales podrán otorgar a un grupo empresario o proveedor el 30 por ciento del espacio de una góndola, que deberá compartir con al menos otros cinco proveedores.

También determina que se le deberá brindar 25 por ciento a los productos de las Pymes y un 5 por ciento a los de la agricultura familiar.

El objetivo de la medida es desconcentrar la oferta de productos de primera necesidad en las grandes cadenas de supermercados, que se amplíen las posibilidades de consumo por fuera de las dos o tres (o a veces solo una) marcas dominantes. La mayor competencia permitiría evitar abusos de precios y dar más oportunidades a las pymes.

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