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En Magdalena

Un empresario que ocultó un caso de Covid-19 y tenía que estar en cuarentena, estaba haciendo un reparto ilegal

Se trata del dueño de la "Distribuidora Berisso", un mayorista de alimentos de La Plata. El local está clausurado por un caso de coronavirus y el personal tenía que estar con aislamiento

Es todo lo que está mal. La situación de la Distribuidora Berisso, un mayorista de alimentos de La Plata, se puede explicar así, parafraseando una leyenda muy usada en redes sociales. Es que luego de ser denunciados por esconder una caso de Coronavirus de uno de sus empleados, ahora los dueños fueron encontrados en Magdalena haciendo un reparto clandestino y cuando ellos mismos debían estar en cuarentena. 

Por este motivo, Abel Néstor Aguirre y un socio fueron interceptados hoy en la terminal de ómnibus por un agente de control urbano de la municipalidad que dirige el radical Gonzalo Peluso.

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En el acta de secuetro -firmada por Aguirre también- del vehículo, un Ford Kuga blanco, figura como "propietario" del negocio y que no podía realizar la entrega de pedidos "porque había sido clausurado"

Además, en el documento, al que accedió INFOCIELO, se deja constancia que carecía de "habilitación municipal" para transportar esa carga porque era un auto que no aseguraba "temperatura, higiene y salubridad" para sustancias alimenticias. 

También fue secuestrado un segundo auto marca Fiat que viajaba igualmente cargado. El operativo tuvo lugar a las 18:45.

Se trata del segundo intento fallido de esta de firma de querer llegar con productos a Magdalena luego de que se haya tomado conocimiento del caso positivo del virus. La primera vez, la comuna frenó un camión y ahora se movió para detener esta maniobra

La Municipalidad de La Plata avanzó con la "clausura preventiva" este miércoles por denuncias de los propios trabajadores del lugar, los cuales estaban siendo obligados a asistir a pesar de que un compañero había sido dado por contagiado desde el sábado.

En esa ciudad, no salían del asombro. Allí, cientos de pequeños comerciantes pasan penurias económicas pero respetan la cuarentena que indica el Gobierno nacional. El esfuerzo de toda la localidad por ahora mantiene en cero el número de contagios, un "invicto" que puso en juego este "inescrupuloso", como no dudaban en llamarlo desde el Ejecutivo. 

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