DESPUÉS DEL BATACAZO

El peronismo le reza a “San Massa” por su aporte decisivo para recuperar la Provincia

El renunciamiento de Sergio Massa a su candidatura presidencial fue una jugada sorpresiva y definitoria para el resultado que obtuvo el peronismo en las elecciones de ayer, y que lo dejaron de cara a lo que a priori parecía una misión imposible: recuperar la Provincia y la Nación, en manos de Cambiemos desde 2015.

Los resultados provisorios hablan de una diferencia de 17 puntos y en el Gobierno provincial la consideran prácticamente indescontable. Ni el más optimista de los dirigentes que frecuentan el Instituto Patria, y tampoco el más soñador de los intendentes, esperaba una ventaja tan categórica respecto de María Eugenia Vidal.

Por eso, transcurridos los momentos de euforia, todos tomaron la calculadora y trazaron hipótesis en busca de una explicación. Y la mayoría llegó a una conclusión que se tradujo en una estampita: la de “San Massa”, el hombre que sumó 10 puntos fundamentales para consolidar el triunfo. 

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Los fríos números concluyen en que el aporte de Sergio Massa es prácticamente idéntico a los votos que obtuvo en la elección de 2017. Entonces llegó a 11 puntos, en una elección que se polarizó después de las PASO, en las que alcanzó los 14. Unidad Ciudadana, el Frente que capitaneaba Cristina Kirchner separada del PJ, logró primero 34 y luego 37 puntos.

En política no se recomiendan proyectar resultados ni análisis mediante las sumas aritméticas de los votos de dos candidatos. Pero en este caso el resultado es asombroso: sumados, los votos de UC y UNA de aquellas Primarias arrojan un 49.6 por ciento, el número que el escrutinio provisorio le da a Axel Kicillof.

En los distritos también se verifica ese “acople”. Por eso vino el reconocimiento: “Massa fidelizó su voto y convenció a su gente de la necesidad de la unidad por encima de las diferencias”, analizan los intendentes del Conurbano, donde no dejan pasar el “trabajo sucio” de los medios oficialistas, para hacerlo desistir de llevar a cabo la idea de la unidad.

El aporte fue decisivo en el interior provincial, y el resultado fue que el peronismo volvió a ser competitivo. Incluso se dio el lujo de ganar en la segunda y en la cuarta sección. Para octubre, quedó entre 1 y 3 puntos abajo en las secciones restantes. También ganó en La Plata, que venía siendo esquiva a las propuestas desde el peronismo desde hacía varias elecciones: exactamente cuatro, desde que el propio Massa cortó amarras y se embarcó en el Frente Renovador.

“Massa le sumó 10 puntos a la candidatura (del Frente de Todos), concretamente. Esto le permitió dar vuelta el resultado”, razonó hoy Nelson Castro en la pantalla poco amistosa de Todo Noticias, que supo cuestionar con dureza la decisión de Massa, sometida a la aprobación de todo el Frente Renovador.

Ayer, en la euforia del triunfo, hizo un poco de catarsis: “cuando construimos esta nueva coalición para darle a los argentinos una nueva mayoría, muchos decían '¿cómo van a hacer estos tipos para hacer campaña?'. Dudaban de que tuviéramos la capacidad de sentarnos, de pensar juntos, de trabajar juntos”, observó desde el escenario, junto a Axel Kicillof.

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