Carlos Aimar es una referencia directa de Tomás Felipe “Trinche” Carlovich, un personaje muy particular del fútbol argentino, quien se transformó en un mito con el paso de los años y que dejó un legado lleno de fútbol e ilusión ante su fallecimiento.
Uno de los mejores jugadores del fútbol rosarino tuvo su partido de gloria cuando jugó en 1974 para un combinado rosarino que se enfrentó a la Selección Argentina, que se preparaba para jugar el Mundial de Alemania.
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“Era un jugador muy alto, grandote y que tenía un talento enorme. Era un jugador por encima del talento medio, que podría haber jugado en un equipo grande y haberse ido a Europa”, empezó recordando Aimar en diálogo con CIELOSPORTS, en LA CIELO.
“Era de una familia humilde, tranquilo y bien pibe. Prefería salir con los amigos antes de entrenarse para jugar el fin de semana. Tenía condiciones naturales que nunca explotó que podría haberle entregado una gran carrera”, Aimar sobre Carlovich.
Pero más allá de su talento era un jugador indisciplinado. “Era de una familia humilde, tranquilo y bien pibe. Prefería salir con los amigos antes de entrenarse para jugar el fin de semana. Tenía condiciones naturales que nunca explotó que podría haberle entregado una gran carrera”, aclaró el ex futbolista.
Al referenciarlo con un jugador, Aimar marcó la complejidad de encontrar una referencia directa, pero aclaró que “era pícaro para el juego, tenía buena gambeta, siendo un creativo con una buena definición. Es difícil encontrar una referencia directa, aunque muchos dicen que tenía cosas de Riquelme y de Redondo”.
“La historia se fue agrandando con el paso de los años. Tenía condiciones, y yo lo conocí cuando jugamos juntos ya que integramos el mediocampo. Pero no fue mejor que Maradona”, aclaró Aimar al referirse al mito y al jugador.
