
Matías García eligió volver a Gimnasia. Y además eligió esperar. El jugador que terminó antes su vínculo con San Martín de Tucumán y que desechó varias ofertas de otros clubes, hizo todo por regresar al club que lo formó.
El volante llegó al Lobo a mitad de junio y se puso a disposición del Indio Ortiz para arrancar la pretemporada y estar en condiciones para los amistosos. Así lo hizo, pero siempre faltaba algo para que firme su contrato.
Finalmente, después de varios días de entrenar y jugar sin contrato firmado con el club, desde la dirigencia se acercaron con los papeles para sellar el vínculo.
De esta forma, y tal como se había informado, Matías García firmó un nuevo contrato con el Lobo por dos años.