Están todos

El sabor del (re)encuentro

Hace algunos días se confirmó el regreso de Leandro Benítez y Lucas Nardi a Estudiantes, claro que no para jugar sino para trabajar en las Divisiones Juveniles en el primer caso y para dirigir a la Reserva en el segundo de ellos, dándose así un reencuentro muy particular.

Ambos ex mediocampistas surgieron de las inferiores Albirrojas, y en el año 2002 partieron con rumbo a Quilmes, sin lugar en el Pincha, junto a otros dos juveniles que tampoco tenían lugar y encontraron en esa cesión la posibilidad de tener minutos.

¿Quiénes eran esos dos futbolistas? Leandro Desábato e Israel Damonte, quienes hoy se encuentran en el plantel de Primera siendo dos de los principales referentes del grupo, con quienes el Chino había llegado a coincidir nuevamente pero no así Nardi.

Ellos cuatro se sumaron en el Cervecero a otros dos jugadores que hoy también tienen presente Estudiantil, uno en la cancha y el otro fuera de ella, uno surgido del club y el otro adoptado: Agustín Alayes, hoy secretario deportivo, y Rodrigo Braña.

Una vez allí fueron partícipes del histórico ascenso del Cervecero, más allá de que Damonte solo estuvo seis meses y volvió al Pincha, en esa campaña que sirvió para cortar el maleficio de cinco finales perdidas y devolver al club del Sur a Primera luego de doce años.

La fórmula que le dio ese recordado ascenso en la final ante Argentinos, en la cual se impuso por 1 a 0 en la ida e igualó sin goles en la vuelta, seguramente a los hinchas del León les sonará y mucho: centro del Chino Benítez, cabezazo del Flaco Alayes... Y todos a festejar.

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