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Renunció el presidente del Barcelona que enfrentó a Messi

El presidente que enfrentó a Messi finalmente renunció a su cargo junto a toda su directiva. Crónica de un final anunciado.

Josep María Bartomeu, el presidente del Barcelona que quedará en la historia por enfrentarse a Lionel Messi ha presentado su renuncia junta al resto de su junta directiva. De esta forma, un conflicto que parecía haber quedado temporalmente desactivado, vuelve a poner al Barca y al capitán de la Selección en el centro de la escena mundial tras la derrota en el clásico frente al Real Madrid del último fin de semana,

La salida de Bartomeu no sorprende ya que al dejar el cargo no se someterá al voto de la moción de censura que amenazaba con expulsarlo del cargo. O se iba por atrás o se iba por las malas. Lo que si llama la atención de los hechos es que tras la derrota frente al Madrid el saliente había dicho que no se le había pasado por la cabeza dejar el cargo, sin embargo la presión parece haberlo asfixiado lo suficiente como para hacerlo abandonar el barco.

El hombre que quiso manipular a Messi y que quedó expuesto tras sacar a Luis Suárez del club, fue quien recibió el famoso burofax de la Pulga que nunca tuvo buen feeling con el empresario español, un feeling que tampoco había con la gente que le reprochó masivamente su pelea con el rosarino. De hecho, ya había 16.000 firmas juntadas para llevar adelante una votación que lo podía dejar aún peor parado.

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Messi lo vio venir: Bartomeu se va por la puerta de atrás del Barca.

Messi lo vio venir: Bartomeu se va por la puerta de atrás del Barca.

Para Messi la salida de Bartomeu será una nueva presión y ni hablar para Ronald Koeman, el entrenador que llegó para amparar al renunciante presidente. El ídolo máximo del Barcelona no se había andado con vueltas ara calificar a la dirigencia que hoy decidió dar las hurras: "Le dije al club, sobre todo, al presidente, que me quería ir. Se lo llevo diciendo todo el año. Se lo dije al presidente y bueno, el presidente siempre dijo que yo al final de temporada podía decidir si me quería ir o si me quería quedar y al final no terminó cumpliendo su palabra".

Como suele ocurrir en la cancha, Messi vio venir como venía la jugada. Bartomeu quiso imponer poder para mostrarse más importante que la Pulga, pasó de largo y terminó chocando con la puerta de atrás del Barcelona, por donde salen los peores.

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