Diego Maradona: inmortalizado en el Bosque y en Gimnasia
Diego Armando Maradona agarró la conducción técnica del equipo hace un año atrás con el objetivo de salvarlo del descenso y lo logró. Hoy miles de hinchas que fueron felices, lo lloran.
Gimnasia eligió a Maradona como su entrenador después del ciclo de Hernán Darío Ortiz y se hizo realidad después de varias reuniones y encuentros. Ese acuerdo fue su regreso a la Argentina y nuevamente cerca del verde césped, ese aroma que se llevó para siempre.
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De aquella primera vez en esta etapa en el campo de juego del Bosque, a la última el 30 de octubre de este año, pasaron una decena de presencias de Diego Maradona en Gimnasia y desde esa posibilidad recuperó la alegría y volvió a ser feliz en el fútbol argentina.
Gimnasia y Maradona tuvieron idas y vueltas, pero eso ya no cuenta. Lo que quedará en los registros es su vínculo, su último año como profesional y como técnico con el buzo, la gorra y el pantalón del Lobo.
Hace menos de un mes, la ciudad se tiñó de azul y oro. El mundo posó sus ojos en La Plata, y una eterna caravana de hinchas Triperos que le rindieron homenaje a su manera en el día de su cumpleaños número 60.
Mural, y viaje a Brandsen. Los hinchas en motos, camiones y autos se llegaron hasta la casa en la cual se radicó en su último tiempo como técnico de Gimnasia. Cientos y cientos vestidos de pies a cabeza con la ropa del Lobo le cantaron el feliz cumpleaños. Diego sonrió y agradeció.
Luego de ese momento, el entrenador, como pudo, sin querer y obligado se dirigió por última vez hasta el estadio de 60 y 118. Ese 30 de octubre fue la última vez que pisó un campo de juego, y paradójicamente lo hizo en la cancha que le abrió las puertas para su regreso al fútbol argentino.
Nadie querrá recordar aquella última imagen de Diego Maradona, pero es parte de su vida y lo que fueron sus últimos días. Nadie olvidará jamás su presencia en el Bosque y la felicidad que le dio nuevamente a los hinchas de Gimnasia. Creer nuevamente, fue gracias a Diego Maradona.