Lanús comenzó el torneo con la obligación de sumar puntos para no tener que sufrir con el promedio del descenso. El granate largó cerca de la zona roja pero con la tranquilidad de haber superado un arranque sin resultados en el segundo ciclo de Luis Zubeldía en el club, sin embargo, la confianza en el proyecto más victorias que hacen ganar tiempo de trabajo encausaron el cierre de torneo anterior y vigorizaron el electrizante comienzo de esta Superliga.
La victoria sobre la hora de anoche Lanús le da forma a números envidiables: El grana acumula tres victorias consecutivas y además completó un invicto de 10 partidos sobre 12 fechas disputadas (siete victorias y tres empates) y es líder del torneo con 25 puntos junto a Argentinos a un punto de River y Boca. Pero más allá del promisorio presente, el orgullo del equipo que preside Nicolás Russo se basa en que la estructura de este líder, se forjó en la fábrica de talentos de la familia del sur del conurbano.
Los documentos develan de que se trata este Lanús de sangre joven y las pruebas van desde el propio Luis Zubeldía (38) hasta Alexander Bernabei (19), pasando por Lautaro Acosta (31) y llegando a Tomás Belmonte (21) o el protagonista de anoche: el olavarriense Pedro de la Vega (18).