Gastón Sessa contó el gesto que tuvo Alejandro Sabella tras un triunfo de Estudiantes y en medio de la pelea de Gimnasia por no descender
Alejandro Sabella está muy identificado con Estudiantes, pero Gastón Sessa tiene un gran recuerdo de él, en un momento en el que Gimnasia peleaba por no descender.
El clásico platense está lleno de historias. Cientos de protagonistas lo han disputado y miles y miles de hinchas lo han vivido, desde el profesionalismo, y anteriormente en el amateurismo. Previo a un nuevo partido entre Gimnasia y Estudiantes, Gastón Sessa recordó a Alejandro Sabella.
El ex arquero pasó por los dos equipos de la ciudad, y pese a haberle iniciado juicio al club, algo que los hinchas no le perdonan, está identificado con el Lobo. Hoy reveló una historia que tuvo como protagonista al ex entrenador del León.
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En el año 2011, por la fecha 4 del Torneo Clausura 2011, Gimnasia recibió a Estudiantes en el estadio Ciudad de La Plata, solo con hinchas del equipo local. Gastón Sessa era el arquero del equipo que dirigía Ángel Cappa y Alejandro Sabella era el entrenador de Estudiantes.
Ese partido terminó en victoria para la visita, por 2 a 0, con los goles de Gastón Fernández y Enzo Pérez de penal, y en el final del mismo se suscitó un hecho que hoy trascendió públicamente ante lo que contó el ex arquero de aquel equipo Tripero, sobre el ex entrenador Albirrojo.
“Después de un partido que se jugó en el Ciudad de La Plata y que nos ganaron (le dijo a Leandro Desábato), creo que 2 a 0, nosotros estábamos peleando por el descenso y estábamos muertos anímicamente, y cuando nos vamos, llego al vestuario y el jefe de seguridad nuestro me dice al oído ´te busca Sabella´. Me pareció raro, pero le dije que ahí iba”, empezó contando el ex arquero de Gimnasia.
Y prosiguió la historia: “Fui y me abrazó y me dijo ´vos sos el capitán de este barco, no se pueden hundir, sigan metiéndole para adelante que van a salir´. Yo me sorprendí porque era el técnico del equipo rival porque si te podían ver 100 metros debajo de la tierra. Desde ese día, le tomé un respeto grande”.