Domínguez probó, una vez más. Porque para Estudiantes estos partidos finales son ensayos previos al Trofeo de Campeones que definirá ante Vélez, Talleres o Huracán (hasta el momento los tres con chances de ganar la Liga Profesional) el 21 de diciembre en Santiago del Estero.
Esta vez, el foco estuvo puesto en el aspecto defensivo. Luego de recibir cuatro goles en el Cilindro, el Barba armó una línea de cinco para visitar a Belgrano en el Gigante de Alberdi. Una táctica que no le dio resultados y que rápidamente tuvo que modificar.
El trio Rodríguez-Lollo-Boselli no brindó seguridades en el fondo y tanto Jara como el Uvita Fernández se movieron por todo el frente de ataque con bastantes libertades. Así, llegó el primero de Franco, ganando de cabeza en el área sin marca y cumpliendo con la ley del ex.
Domínguez ajustó antes del cierre de la primera mitad, soltó a Meza por derecha y ubicó a Boselli por el lateral. Una decisión acertada que le permitió al equipo pararse mejor y además sumar peso en ataque, ya que hasta el momento no había logrado preocupar al paraguayo Espínola.
El DT del Pincha reafirmó el cambio táctico con la salida de Facundo Rodríguez en el entretiempo y Estudiantes levantó. Manejó mejor la presión y tuvo más la pelota, logrando así dar vuelta el resultado y ponerse al frente justificadamente.
Sin embargo, la tarde-noche cordobesa para Estudiantes fue una de cal y una de arena. Sobre el final el Pincha se olvidó de jugar, Domínguez volvió a armar línea de cinco priorizando cuidar el resultado y el equipo lo sufrió. El Pirata fue como una trompa a buscar el empate e incluso fue por más y estuvo cerca de llevarse los tres puntos.
Estudiantes sigue probando. Ahora queda un solo ensayo, que será ante Argentinos Juniors en UNO. El margen es cada vez más corto y las preguntas siguen siendo más que las respuestas. Es cierto, al Pincha no le mueve la aguja perder dos puntos en Córdoba, pero sí pone el foco en el desempeño del equipo, que sigue siendo irregular y que, en la jornada de hoy, padeció los cambios tácticos y el exceso de retoques defensivos.