El turno de Mariano

La familia Ascacíbar da que hablar en Estudiantes

Hablar del apellido Ascacíbar en Estudiantes es hacerlo sin dudas sobre Santiago, ese volante central criterioso y metedor que debutó a comienzos de 2016 y rápidamente se adueñó del equipo, siendo vendido al Stuttgart en 8 millones de euros solo un año y medio más tarde.

Sin embargo el Rusito, que hoy es figura en el equipo alemán, no es el único futbolista con ese apellido que puede ser asociado con la institución Albirroja, ya que también están tres de sus hermanos. Julián se hizo conocido el año pasado al sumarse a los trabajos del plantel de Primera, y ahora fue el turno de Mariano.

Mariano Ascacíbar es un delantero categoría 2004 que forma parte de la Octava División que conduce Ricardo Iberbia, y el pasado sábado fue noticia al anotar el segundo de los dos goles de su equipo en un empate 2 a 2 ante Talleres de Córdoba en el Predio Amadeo Nuccetelli.

Luego de jugar la temporada pasada en Novena División, pero no en AFA junto a Leandro Testa sino en la Liga Metro de la mano de Juan Ignacio Vinaccia, este joven nueve de área está sumando minutos en la Superliga Juvenil y en la cuarta fecha pudo tener su estreno en la red.

 

UNA FAMILIA DE FUTBOLISTAS


Luego de que Santiago (categoría 1997) se abriera paso en la Primera de Estudiantes, en donde llegó a disputar 50 partidos contando Superliga, Copa Argentina y competencias internacionales, Julián tuvo su primer acercamiento con las cámaras en octubre del año pasado.

Al igual que su hermano mayor este joven mediocampista de la Categoría 2001, que hoy se desempeña en la Quinta que conduce Maximiliano Marquestaut, juega como volante central y se caracteriza por su gran despliegue, más allá de que en su caso puede jugar también por izquierda.

Mariano es el tercero de los hermanos en las Juveniles del León, aunque puede no ser el último: Martín, de la Categoría 2009, juega en Infantiles y podría ser el cuarto de los cinco varones que tuvieron Mariana y Javier en sumarse a la lista. Agustín (24), el más grande, es el único que no jugó.

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