Clarín vs Estudiantes: nueva edición de una pelea de años
Por Andrés Caviglia
A horas de un partido que puede ser clave para Estudiantes en la Copa Libertadores, el Grupo Clarín volvió a provocar al león.
Ya lo había hecho hace unas semanas el periodista partidario Leonardo Farinella desde su columna en TyC Sports y también Clarín Deportivo, al refirirse a Racing como el primer clasificado a cuartos de final de la Copa de la Liga cuando el conjunto de La Plata ya había logrado su objetivo en la jornada inicial consiguiendo un empate sobre el final ante Colón con un equipo de juveniles y suplentes.
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Para el multimedio, Estudiantes no se había clasificado sino que “rescató un punto” en cancha del sabalero y continuaba como líder. Pero pasar de ronda antes que el resto -o peor aún- que los grandes, fue demasiado para digerir para un Clarín que hace años hace una oda a la invisibilización de aquello que no lo beneficia.
Si algo le faltaba a este ciclo de irrespetos es la tapa de Olé de este martes, donde la portada se la lleva Boca en Brasil y se completa con tres apartados: uno para River, otro para el empate de Sarmiento con Argentinos Juniors y el de la agenda de partidos de hoy, donde aparecen todos menos…sí, Estudiantes.
Diario Olé, TyC Sports y Clarín Deportivo, todos forman parte del mismo grupo y se reparten los periodistas de turno, por eso no sorprende el nuevo ninguneo de hoy en la portada del pasquín deportivo que es manejado por el mismo Farinella que escribió que "River era un equipo de Premier que le da esperanza al fútbol argentino "pero que Estudiantes, pese a su presente inmejorable "es otra cosa, otra cultura".
Grupo Clarín vs Estudiantes: el inicio de la pelea mediática con mayor historial
El rechazo del pueblo pincha no demoró en llegar, aunque ninguna provocación lo sorprende demasiado a esta altura . El historial de desprecio hacia los logros obtenidos en La Plata viene de larga data y tiene fecha de inicio: 6 de agosto de 1967.
Ese día, Estudiantes rompió con la hegemonía de los grandes y se transformó en el primer equipo fuera de los cinco bautizados como grandes por la prensa porteña. Desde el inicio del profesionalismo en 1931 hasta el campeonato de los de Zubeldía, los títulos se habían repartido de la siguiente forma: 13 para River, 10 para Boca, 6 para Racing, 5 para Independiente y 4 para San Lorenzo.
Sin embargo, aquello que pareció ser algo aislado se transformó en la piedra fundamental de una obra histórica y que sigue en vigencia. El pincha iba a lograr tres Copas Libertadores de forma consecutiva (1967-68 y 69), iba a conquistar el mundo al vencer a Manchester United en Old Trafford en el 68´, la interamericana en el 69´ y el sendero de la mística se dio por armado para tener presencia en las décadas posteriores, donde volvió a sentir el rigor del monopolio porteño.
Aquel equipo de Zubeldía fue tildado de "anti fútbol", el bicampeón de Bilardo primero y Eduardo Luján Manera después fueron hostigadoa por la prensa pese a su mediocampo de lujo con tres enganches; y lo mismo pasó cuando volvió a los primeros planos en 2006 con Diego Simeone, en 2009 con la obtención de la Libertadores con Alejandro Sabella y con el Apertura 2010, de la mano del magno.
El Cholo Simeone, que ganó 10 títulos con el Atlético de Madrid compitiendo contra los gigantes de Europa, el mejor Barcelona y el Real Madrid, sigue siento tildado de defensivo, por ser un defensor férreo del resultadismo y del Bilardismo. El propio Alejandro Sabella, que llevó a la Selección Argentina a una final del mundo después de 24 años no sólo fue hostigado por "defensivo" sino que hasta se lo llegó a llamar "cagón", por parte de gente que utiliza palabras sutiles para explicar vanalidades, pero que se vuelve vanal para explicar lo que no quiere entender.
La historia pincha le otorgó gloria no sólo al fútbol argentino sino que le brindó y le brinda técnicos con pasta de Selección, algo que irrita sobremanera a un sector que añora los años menottistas o mejor dicho, que vive ahogado en un debate de estilos que murió hace tiempo. Un debate que terminó de enterrar el propio Pep Guardiola cuando, consultado por las estrategias de Simeone, sentenció: “ No gastaré un minuto en el debate estúpido de estilos, todos buscamos ganar”.
Desde este espacio tampoco se gastará demasiado tiempo más. La explicación la dará Carlos Bilardo, el hombre que será recordado como el que venció las provocaciones para transformarse en la bandera de millones: " Mi problema con estos periodistas -de Clarín- viene mucho antes del '86, viene desde 1965, con Estudiantes de La Plata. Son los mismos que ya se están por jubilar. Les debe faltar un año, por suerte. La relación con esa gente sigue igual que en el año '65, pero con 40 años más cada uno. El tiempo dirá quién tuvo razón. Fue una lucha muy intensa. Yo estudié medicina seis años y a «Clarín» deportivo lo estudié más de 20. Yo sabía cuándo «Clarín» me empezaba a pegar, a dónde me iba a apuntar, cuándo iba a parar. Se lo dije hasta al presidente de la República".