Inmutable, confiado y convencido. No hay un mínimo atisbo de duda en la mirada de Gonzalo Montiel que parece no sentir el peso de los 36 años que llevaba la Selección Argentina sin ganar la Copa del Mundo. El recorrido del ex River y su remate que pasó a la historia fue tal calidad que el arquero francés, Hugo Lloris, ni siquiera salió en las fotos en el penal decisivo.
En las últimas horas una cámara muy pocas vista de un primerísimo primer plano del nacido en González Catán en los segundos previos a definir la Copa del Mundo en Qatar 2022. Una cámara captó el momento exacto de la ejecución del lateral del Sevilla que ya había demostrado ser un especialista en este tipo de disparos en su paso por el Millonario de Núñez.
Lo que pocos recuerdan es que, tal como lo hacía en el barrio, Montiel nunca falló un penal. Este es un dato que de haberse sabido no se hubiera dicho por ningún comentarista en la previa del remate que le dio a la Argentina su tercera estrella y la primera a Lionel Messi tras años de buscar la copa del mundo. La estadística es totalmente abrumadora. 10 penales pateados en su carrera, 10 convertidos. Definitivamente, era el indicado para ese momento histórico para la historia del fútbol mundial.
Montiel ya había ejecutado con certeza ante Países Bajos (anotó el cuarto de la serie que definió Lautaro Martínez para el 4 -3 final) y para el penal más difícil de su carrera eligió el “no look” que había registrado en River y que fue ejecutado por años por Ronaldinho. La técnica incluye cruzar el remate pero sin poner la vista fija en el balón o el arquero para que este no adivine las intenciones del pateador en cuestión.