“Es extraño, por suerte, con la naturalidad que jugó. Con la naturalidad que le tocó entrar en cancha de Racing. Y como lo hizo con Independiente, con la exigencia de ser locales y buscar ganar. No es normal con la tranquilidad y el aplomo que lo hizo“.
La frase que Eduardo Domínguez le destinó a Mikel Amondarain no pasó inadvertida. Sobre todo, porque el Barba no es de elogiar así porque sí y menos a los pibes. “Pies sobre la tierra”, advierte siempre cuando habla del crecimiento de uno de los juveniles. El DT, en ese sentido, tiene otra máxima: no es lo mismo destacarse en Reserva que jugar en Primera. Sin embargo, está claro que el volante nacido en Bavio lo sorprendió. Tanto, que hasta podría hacerlo jugar de titular ahora en la Libertadores.
Sí, para Mikel podría ser un nuevo debut. Y encima, de manera consecutiva. Ya tuvo su estreno en Primera nada menos que en un partido caliente contra Racing, luego llegó su estreno como titular contra Independiente Rivadavia y de local, y ahora podría tener su estreno copero, en una serie de todo o nada, nada menos que de visitante ante Cerro Porteño.
Titular en el primer equipo que ensayó el Barba
Por lo pronto, en el ensayo de fútbol que hizo este lunes, el DT lo puso en el primer equipo acompañando otra vez a Santiago Ascacibar. Una de las virtudes del pibe, además del aplomo que mostró (tal cual destacó Domínguez) es que le permitió al Ruso volver a ser el Ruso. Es decir, le dio respaldo y permitió que el capitán pudiera soltarse más. Desde ese lugar, su ingreso también fue productivo en lo particular pero también en lo general.
Es cierto que también le jugó a favor las lesiones que sufrieron Gabriel Neves y Ezequiel Piovi, quienes pueden ocupar justamente su función. Pero el pibe, de todos modos, expuso nuevas virtudes que hacen que pueda pelear por ese lugar cuando estén listos para volver.
Después, Domínguez lo sacó a él y a Cetré para poner a Santiago Núñez y a Fabricio Pérez y así armar una especie de 5-4-1 con Pérez y Palacios por los costados y Medina y Ascacibar por el centro. Esta es la otra alternativa que estudia el DT.
Pero está claro que Amondarain llegó para quedarse en Primera. Y que si bien el año pasado le costó, en esta pretemporada de invierno mostró otra maduración y su ingreso terminó por enamorar a Domínguez. Así, el volante de Bavio pinta para ser la bandera de esta nueva etapa de su ciclo, con más pibes en cancha, en una renovación que el club también pretendía y que el entrenador le empieza a dar forma…
¿El 11 ante Cerro Porteño?
Por lo pronto, el equipo que inició el entrenamiento tuvo a Muslera: Meza, González Pírez, Rodríguez y Aramendia; Amondarain, Ascacibar y Medina; Palacios, Carrillo y Cetré.