BIODIESEL Y BIOETANOL

Biocombustibles: expectativa de PYMEs por una nueva ley

Frente a la posibilidad de prorrogar el régimen actual de promoción, PYMES apuestan por una nueva ley que de previsibilidad al negocio de los biocombustibles

Pequeños empresarios dedicados al negocio de los biocombustibles están a la expectativa de un proyecto de ley que prepara Máximo Kirchner para establecer reglas claras a 10 años y ventajas para las PYMEs frente a los abusos de los grandes jugadores del sector.

La ley es la explicación de por qué se frenó la prórroga de la ley 26.093 que establece, como su título señala, un Régimen de Promoción para la Producción y Uso Sustentable de Biocombustibles. Esa norma caduca en mayo de este año. Su renovación tiene media sanción en el senado pero se freno en diputados.

TE PUEDE INTERESAR

Allí se cocina una norma superadora y más abarcativa que ilusiona a las PYME. Es el caso de Bojargo, una PYME radicada en Ramallo que refina glicerina, un derivado del proceso que genera biodiesel, y que con reglas claras y previsibilidad puede abastecer de energía al mercado interno y de divisas al país.

“Necesitamos una ley que dure más tiempo y de un marco adecuado a las circunstancias actuales. Renovar el régimen de promoción es sólo patear la pelota para adelante”, explicó a INFOCIELO su titular, Juan Carlos Bojanich, que produce biodiesel en Bahía Blanca con una planta de 50 mil toneladas. Esa necesidad quedaría zanjada en el nuevo régimen, que tiene un plazo de vigencia de seis años prorrogable por otros tres, con lo cual duraría hasta 2030.

La ley que se prepara en Diputados protege y promociona las plantas de hasta 50 mil toneladas, de capitales nacionales, que estén alejadas de los puertos. Esto es esencial para el desarrollo del interior y de las economías regionales”, analizó el empresario que apuesta fuerte al compromiso de generar más inversión y valor agregado, como en el caso de la refinación de glicerina, un producto que se exporta en su totalidad.

Establece que el 100% del corte mínimo obligatorio sea distribuido entre las PYMES garantizando a los mismos cuota, precio y tiempo. La definición de PYME es tajante: firmas que no superen las 50 mil toneladas de biodiesel o los 90 mil metros cúbicos de bioetanol de maíz, y que tampoco sean socias, subsidiarias o tengan relación con empresas grandes o de capitales extranjeros de la misma actividad.

Hoy, las pequeñas empresas dedicadas al biodiesel dependen de las cambiantes reglas del juego, que las someten a un régimen de paro constante. “Hace cuatro o cinco años venimos trabajando dos o tres meses, paramos, volvemos a arrancar, y esto no nos sirve ni a las plantas ni al pais”, sostuvo Bojanic.

Esto se debe a la política de disparar y controlar los precios, y a la fijación de los porcentajes de corte, es decir, de la proporción de derivados de productos agrícolas que se pueden mezclar en el hidrocarburo, y que para abril y mayo debería llegar al 10 por ciento. La nueva ley prevé pisos y mecanismos compensatorios para hacer frente a las fluctuaciones de precios en los mercados internacionales.

TE PUEDE INTERESAR